Por: Luis Miguel Isidoro
La reciente reforma laboral propuesta por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, que busca reducir la jornada laboral de 8 horas a 6 horas, ha generado un intenso debate en México. Algunos lo ven como una medida beneficiosa para los trabajadores, mientras que otros la consideran un golpe al sector empresarial.
Sin embargo, a mi parecer, la medida puede tener beneficios tanto para los trabajadores como para las empresas. A continuación, expondré algunos de ellos:
En primer lugar, es importante destacar que esta medida puede mejorar la calidad de vida de los trabajadores. Al reducir la jornada laboral, se les permitirá contar con más tiempo libre para realizar actividades que les resulten placenteras y satisfactorias, lo que puede redundar en una mayor satisfacción personal y una mejor salud mental.
Asimismo, la medida puede contribuir a reducir la tasa de
absentismo laboral y el estrés laboral, dos de los principales problemas que
afectan a los trabajadores hoy en día. Al reducir la cantidad de horas
trabajadas, los trabajadores pueden sentirse menos agotados y tener más energía
para dedicarse a sus actividades diarias fuera del trabajo.
En cuanto a las empresas, la medida también puede ser beneficiosa. A pesar de
que algunas empresas podrían experimentar una disminución en su productividad,
al tener menos horas de trabajo, otras pueden verse beneficiadas al tener
trabajadores más descansados y menos estresados, lo que puede redundar en una
mayor eficiencia y en una menor cantidad de accidentes laborales.
La reducción de la jornada laboral ha sido implementada con éxito en varios países de América Latina, Europa y Asia. Aunque los resultados pueden variar según el sector y la empresa, los casos exitosos demuestran que es posible mejorar la calidad de vida de los trabajadores y aumentar la productividad al mismo tiempo.
En América Latina, Uruguay es uno de los países que ha
implementado con éxito la reducción de la jornada laboral a 6 horas en algunas
empresas. En 2016, la empresa MontevideoGas implementó esta medida, lo que
resultó en un aumento de la productividad y una disminución del absentismo
laboral. Otros países de la región como Chile y Argentina también han
experimentado con la reducción de la jornada laboral, aunque en menor medida.
En Europa, uno de los casos más conocidos es el de Suecia. En 2015, el gobierno
sueco implementó la jornada laboral de 6 horas en algunos sectores, con
resultados positivos. Las empresas experimentaron una mejora en la
productividad y una disminución del absentismo laboral. En Francia, una ley
aprobada en 2017 permite a las empresas reducir la jornada laboral a 35 horas
semanales, aunque no de manera obligatoria.
En Asia, Japón es un país que ha experimentado con la reducción de la jornada laboral. En 2018, la empresa Uniqlo implementó la jornada laboral de 4 días a la semana, lo que resultó en una mayor satisfacción de los trabajadores y un aumento de la productividad. En China, algunas empresas han implementado la jornada laboral de 996, es decir, trabajar de 9 de la mañana a 9 de la noche, 6 días a la semana. Sin embargo, esta medida ha sido criticada por su impacto en la salud y el bienestar de los trabajadores.
En Estados Unidos, aunque no hay una regulación federal que
establezca la jornada laboral máxima, algunas empresas han experimentado con la
reducción de la jornada laboral. Por ejemplo, la empresa Microsoft en Japón
implementó la jornada laboral de 4 días a la semana en 2019, lo que resultó en
una mejora en la productividad y la satisfacción de los trabajadores.
La medida en México puede contribuir a mejorar la imagen de las empresas ante
la sociedad. Si bien algunas empresas pueden considerar que la reducción de
horas laborales puede perjudicar sus resultados financieros, es importante
recordar que cada vez son más los consumidores que prefieren comprar productos
o servicios de empresas que demuestran una preocupación genuina por el
bienestar de sus trabajadores.
Considero que la propuesta de reducción de la jornada laboral de 8 a 6 horas puede ser beneficiosa tanto para los trabajadores como para las empresas. Si bien es cierto que puede haber algunos desafíos y dificultades que superar, creo que es importante seguir avanzando en la creación de entornos laborales más justos y saludables para todos.
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