Con el arribo de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República, con el 53%
de los votos, más de 33 millones de
votos, la Izquierda por fin vio
coronada su lucha histórica de varios líderes, que encontraron en aquel triunfo
electoral del 1° de julio de 2018, un laurel con sabor a victoria. Sin embargo,
como el mismo Presidente lo ha dicho, este proceso representa la llamada por
él, la Cuarta Transformación (4T) de la vida pública del País, y no
es el fin, sino el vehículo de poder que pueda transitar hacia un verdadero
cambio de Régimen Político, para
llevar al País a un verdadero proceso de desarrollo.
América Latina ya ha visto en su vida política procesos de cambio
en sus Gobiernos, alternancias, primaveras electorales, las cuales, han sentado
las bases de operación para dar un giro en sus modelos económicos y formas de
distribución de los recursos económicos en sus Países, no ha sido fácil, pues
han tenido que tener un constante combate con las grandes transnacionales y élites de poder mundial capitalista.
Algunos Países han dado muestra de que los cambios de Régimen se pueden lograr
con éxito para darle a sus pueblos un estado de Bienestar, sobre todo a
las clases más desprotegidas, en su momento Brasil, Argentina, Uruguay, de más lapso
de Gobierno, como el caso de Bolivia,
que logró a través de Evo Morales
llevar la Justicia Social a sus
niveles más altos y con verdadero potencial de crecimiento, motivo por el cual,
las más grandes Organizaciones de control
mundial llevan a cabo procesos de desestabilización y toma del poder para
controlar a través del amañado estandarte de llevar Democracia a esa nación,
mientras los intereses económicos Geopolíticos, reales y potenciales, quedan
encubiertos en Democracia, Liberación de Dictaduras, Ayuda Humanitaria, Combate
al Robo Digital de Datos, Protección y ayuda en Seguridad Pública, entre otras
farsas.
México tiene la oportunidad histórica de llevar a cabo una profunda
transformación, pero la 4T solamente
es el inicio de dicho proceso, y no es el Fin
Romántico que ven varios líderes políticos, no es el Objetivo Final, ni es la
etiqueta del hecho de haber logrado el triunfo electoral y ya; la 4T debe plantearse como el puente, que
permita continuar la transformación y, que derive en un Nuevo Proyecto de Nación, que deje sentadas las bases a través del
Sexenio para consolidar el cambio de Régimen.
Cuando Andrés Manuel López Obrador
se encontraba en campaña hablaba de un Proyecto
Alternativo de Nación como mecanismo de lucha y oposición al Poder de aquél
entonces, y buscaba que ese Proyecto Alternativo lograra Alternancias aunque fuera a nivel Estatal, Municipal o Comunitario para ir construyendo desde abajo
el Bienestar Social y que la gente
percibiera ciertas diferencias en la forma de gobernar. Así fue como por varios
años, más de una década de lucha, con todos sus momentos políticos y matices, el
llamado Proyecto Alternativo de Nación
empezó a estructurarse y cada vez más logró permear el Despertar de la Consciencia Social, sumando a Intelectuales,
Ideólogos Políticos, Líderes de Opinión, Representantes Sociales, Líderes de
varios estratos sociales; surgieron varios documentos, Planes de proyección de
lo que podía hacerse, y la gente empezó a creer en esos ideales de cambio.
Actualmente, ya no puede
hablarse de Proyecto Alternativo de
Nación donde la Izquierda era oposición,
hoy se tiene el Poder desde la
Presidencia de la República y se debe hacer uso de todos los mecanismos
para llevar a cabo una profunda transformación, cosa nada fácil, pues el Neoliberalismo sigue enraizado a través
de las Leyes, enmarcadas en la Constitución vigente, además de la
Infraestructura Institucional que implementó. Cientos de bloques debe enfrentar
el actual Gobierno para lograr de forma paralela el cumplir los
compromisos de campaña, de su Plan Sexenal, y a la vez ir consolidando el
cambio de Régimen.
Las 3 Transformaciones anteriores en la vida pública del País, (Independencia, Reforma y Revolución) de
las que habla el Presidente Andrés Manuel López Obrador, han dado origen a
nuevas Constituciones. Es cierto que
la Constitución
vigente ha ido sufriendo algunos cambios, reformas estructurales, que
permiten implementar de cierta forma la operación de Programas de Bienestar y, Políticas Públicas distintas que pueden
marcar diferencias en la forma de Gobierno. Sin embargo, es vital y
prioritario, analizar y buscar con las mayorías logradas en las cámaras, -sea
cual sea la forma en que se ha logrado el consenso-, el pensar en proyectar un Constituyente que origine una Nueva Constitución, la cual sea acorde a
las necesidades actuales del País y que sus Leyes permitan llevar a cabo la tan
llamada 4T, sino sólo quedará en una
Alternancia más, -ahora de la
Izquierda-, en la Era Democrática Posmoderna
de México.
Es la oportunidad de que se
estimule la Unidad de todos los sectores y de todos los niveles
de Gobierno, del Legislativo. No es una Tarea fácil,
pues se atraviesan en el Sexenio varios Procesos Electorales, en algunos
Gobiernos Estatales y Municipales, Legislaciones Federales y Locales, y las
correlaciones de poder pueden cambiar, pero es ahí donde se debe trabajar, y
dejar de lado los intereses mezquinos, de los Partidos Políticos, cuando está
por delante la búsqueda del Bienestar
para el pueblo de México.
El Partido en el poder, MORENA, no ha sabido estar a la altura
de las circunstancias, ni lograr consolidar el itinerario hacia la Hegemonía,
se desgrana por intereses cupulares y proyectos personales de actores
políticos.
Las condiciones políticas son
óptimas, el camino está trazado, el combate a la Corrupción presenta ya algunos
frutos y beneficios económicos para el País, se tiene un Presidente de la
República Líder, que goza aún de credibilidad, que permite llevar a cabo la Justicia Social, la búsqueda del Apalancamiento de Desarrollo y
potenciar a la Nación en América Latina,
es el momento de trabajar desde las Bases
Sociales para permear y consolidar la Ideología con Contenido, con la emisión
de una nueva Cultura Moral en el Pueblo,
de un Nuevo Proyecto de Nación para
los próximos años, que siga despertando la Consciencia
Social, llegando a más sectores y estratos de la población, más allá de los
Partidos Políticos, para lograr la
Implantación de este Nuevo Régimen.
No hay comentarios:
Publicar un comentario