jueves, 21 de noviembre de 2019

DE LA 4T A UN NUEVO PROYECTO DE NACIÓN



Con el arribo de Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República, con el 53% de los  votos, más de 33 millones de votos, la Izquierda por fin vio coronada su lucha histórica de varios líderes, que encontraron en aquel triunfo electoral del 1° de julio de 2018, un laurel con sabor a victoria. Sin embargo, como el mismo Presidente lo ha dicho, este proceso representa la llamada por él, la Cuarta Transformación (4T) de la vida pública del País, y no es el fin, sino el vehículo de poder que pueda transitar hacia un verdadero cambio de Régimen Político, para llevar al País a un verdadero proceso de desarrollo.

América Latina ya ha visto en su vida política procesos de cambio en sus Gobiernos, alternancias, primaveras electorales, las cuales, han sentado las bases de operación para dar un giro en sus modelos económicos y formas de distribución de los recursos económicos en sus Países, no ha sido fácil, pues han tenido que tener un constante combate con las grandes transnacionales y élites de poder mundial capitalista. Algunos Países han dado muestra de que los cambios de Régimen se pueden lograr con éxito para darle a sus pueblos un estado de Bienestar, sobre todo a las clases más desprotegidas, en su momento Brasil, Argentina, Uruguay, de más lapso de Gobierno, como el caso de Bolivia, que logró a través de Evo Morales llevar la Justicia Social a sus niveles más altos y con verdadero potencial de crecimiento, motivo por el cual, las más grandes Organizaciones de control mundial llevan a cabo procesos de desestabilización y toma del poder para controlar a través del amañado estandarte de llevar Democracia a esa nación, mientras los intereses económicos Geopolíticos, reales y potenciales, quedan encubiertos en Democracia, Liberación de Dictaduras, Ayuda Humanitaria, Combate al Robo Digital de Datos, Protección y ayuda en Seguridad Pública, entre otras farsas.

México tiene la oportunidad histórica de llevar a cabo una profunda transformación, pero la 4T solamente es el inicio de dicho proceso, y no es el Fin Romántico que ven varios líderes políticos, no es el Objetivo Final, ni es la etiqueta del hecho de haber logrado el triunfo electoral y ya; la 4T debe plantearse como el puente, que permita continuar la transformación y, que derive en un Nuevo Proyecto de Nación, que deje sentadas las bases a través del Sexenio para consolidar el cambio de Régimen. Cuando Andrés Manuel López Obrador se encontraba en campaña hablaba de un Proyecto Alternativo de Nación como mecanismo de lucha y oposición al Poder de aquél entonces, y buscaba que ese Proyecto Alternativo lograra Alternancias aunque fuera a nivel Estatal, Municipal o Comunitario para ir construyendo desde abajo el Bienestar Social y que la gente percibiera ciertas diferencias en la forma de gobernar. Así fue como por varios años, más de una década de lucha, con todos sus momentos políticos y matices, el llamado Proyecto Alternativo de Nación empezó a estructurarse y cada vez más logró permear el Despertar de la Consciencia Social, sumando a Intelectuales, Ideólogos Políticos, Líderes de Opinión, Representantes Sociales, Líderes de varios estratos sociales; surgieron varios documentos, Planes de proyección de lo que podía hacerse, y la gente empezó a creer en esos ideales de cambio.

Actualmente, ya no puede hablarse de Proyecto Alternativo de Nación donde la Izquierda era oposición,  hoy se tiene el Poder desde la Presidencia de la República y se debe hacer uso de todos los mecanismos para llevar a cabo una profunda transformación, cosa nada fácil, pues el Neoliberalismo sigue enraizado a través de las Leyes, enmarcadas en la Constitución vigente, además de la Infraestructura Institucional que implementó. Cientos de bloques debe enfrentar el actual Gobierno para lograr de forma paralela el cumplir los compromisos de campaña, de su Plan Sexenal, y a la vez ir consolidando el cambio de Régimen

Las 3 Transformaciones anteriores en la vida pública del País, (Independencia, Reforma y Revolución) de las que habla el Presidente Andrés Manuel López Obrador, han dado origen a nuevas Constituciones. Es cierto que la Constitución vigente ha ido sufriendo algunos cambios, reformas estructurales, que permiten implementar de cierta forma la operación de Programas de Bienestar y, Políticas Públicas distintas que pueden marcar diferencias en la forma de Gobierno. Sin embargo, es vital y prioritario, analizar y buscar con las mayorías logradas en las cámaras, -sea cual sea la forma en que se ha logrado el consenso-, el pensar en proyectar un Constituyente que origine una Nueva Constitución, la cual sea acorde a las necesidades actuales del País y que sus Leyes permitan llevar a cabo la tan llamada 4T, sino sólo quedará en una Alternancia más, -ahora de la Izquierda-, en la Era Democrática Posmoderna de México.

Es la oportunidad de que se estimule la Unidad de todos los sectores y de todos los niveles de Gobierno, del Legislativo. No es una Tarea fácil, pues se atraviesan en el Sexenio varios Procesos Electorales, en algunos Gobiernos Estatales y Municipales, Legislaciones Federales y Locales, y las correlaciones de poder pueden cambiar, pero es ahí donde se debe trabajar, y dejar de lado los intereses mezquinos, de los Partidos Políticos, cuando está por delante la búsqueda del Bienestar para el pueblo de México.

El Partido en el poder, MORENA, no ha sabido estar a la altura de las circunstancias, ni lograr consolidar el itinerario hacia la Hegemonía, se desgrana por intereses cupulares y proyectos personales de actores políticos.

Las condiciones políticas son óptimas, el camino está trazado, el combate a la Corrupción presenta ya algunos frutos y beneficios económicos para el País, se tiene un Presidente de la República Líder, que goza aún de credibilidad, que permite llevar a cabo la Justicia Social, la búsqueda del Apalancamiento de Desarrollo y potenciar a la Nación en América Latina, es el momento de trabajar desde las Bases Sociales para permear y consolidar la Ideología con Contenido, con la emisión de una nueva Cultura Moral en el Pueblo, de un Nuevo Proyecto de Nación para los próximos años, que siga despertando la Consciencia Social, llegando a más sectores y estratos de la población, más allá de los Partidos Políticos,  para lograr la Implantación de este Nuevo Régimen.

No hay comentarios:

Publicar un comentario